Nos vendieron un buzón. Por César Marschoff
La opinión del hincha |
Estimados amigos xeneizes,
Esta tarde, nuestro primer equipo de fútbol igualó 3 a 3 con Tigre en condición de local. En mi opinión, se rescató un punto solamente por el amor propio de nuestro número 10 (que probó al arco de todos lados, generó la situación del primer gol y convirtió el segundo) y por el zapatazo de Clemente (esperemos que lo ayude a volver al nivel que supo tener en épocas pasadas).
El equipo volvió a dar muestras de ser un conglomerado de sombras deambulando por la cancha (hecha ya la excepción de Román, quien a su vez encontró en Martín a su socio más prolijo, cosa impensada teniendo tantos jugadores de los llamados “de buen pie”).
Sin embargo quiero compartir unos datos que busqué, para confirmar mi sospecha, acerca de la gigante incapacidad del actual DT. Técnico que llegó al club con auspicios de “trabajador”, “armador de equipos sólidos”, “ordenado” y demás que todos recordaremos.
Por el contrario, al DT anterior (no Pompei, sino Borghi), se le criticaba exactamente lo que supuestamente Falcioni iba a aportar. Se decía que no era muy trabajador, que el equipo era un desorden, y por sobre todas las cosas se le cayó encima a la famosa “línea de 3”, diciendo que “no era el estilo tradicional del club”, que “nos entraban por todos lados”, etc, etc, etc.
Si bien coincido en que el Boca de Borghi no logró un buen nivel (nadie puede pensar eso), no recordaba sentirme tan, pero tan poco identificado con el equipo como me siento con éste. Yendo a los datos de los que hablaba antes:
1) A esta altura del campeonato pasado el equipo tenía 2 puntos más que el de Falcioni.
2) Tenía 6 goles más a favor (14 contra 8).
3) Tenía la misma cantidad de goles en contra (14) y se lo defenestraba por “el sistema”
4) Ningún equipo le había convertido más de 2 goles
5) No había contado con Riquelme en ninguna fecha
6) Había mostrado momentos de buen fútbol (contra Vélez, contra Colón)
7) Por sobre todas las cosas, salía a buscar los partidos en todas las canchas.
Al margen de todo esto, está la particular personalidad del DT, sus desafortunadas declaraciones y demás cosas que todos conocemos. Con Falcioni nos vendieron un buzón grande como una casa. El técnico “ordenado” recibe igual cantidad de goles que el otro (además de comerse goleadas), lleva al equipo en peor posición y deja una imagen vergonzosa de un Boca temeroso de visitante y de local. Creo que si hubiera seguido Borghi (si bien renunció y nadie lo echó) hoy estaríamos bastante mejor. Y para cerrar, en cuanto al sistema de juego, opino lo mismo que dijo Riquelme acerca de la línea de 3 de aquel equipo “la línea de 3 es cuando se saca del medio, nada más”. Y agrego, lo que marca la diferencia es la actitud del equipo. Y la de este Boca es la de un equipo que tiene miedo.
Para cerrar, personalmente, yo pedía que se le diera tiempo a Borghi (aunque ya después de los últimos partidos le había perdido la paciencia). Ahora pido encarecidamente que no se le dé más tiempo a uno de los DT más vergonzosos que hemos tenido.
Por César Marschoff (Twitter: @dosmorochas)
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