¿Como ven a Boca en España?
5.000 'eurazos' para ver jugar al Boca a pie de campo |
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Buenos Aires.- El equipo más popular de Argentina ha construido ocho palcos VIP junto al campo y los subastará como si fuesen inmuebles exclusivos.
Al cantautor español Joan Manuel Serrat le gusta fanfarronear cuando viene a Buenos Aires con que 'La Bombonera' –el estadio del Boca Juniors, club de fútbol de sus amores en Argentina- no "vibra" en cada partido sino que "palpita", como el corazón.
Algo de eso hay, mal que les pese a los contrincantes, porque el equipo más popular del país ha construido ocho palcos VIP junto al campo de juego y en octubre los sacará a subasta entre las empresas, como si fuesen inmuebles exclusivos.
Cada 'suite' –así los llaman- estará ubicada estratégicamente a los costados y detrás de los banquillos de los locales y los visitantes. "Los hinchas tendrán la posibilidad de vivir los partidos como si fueran parte del equipo, una experiencia única", publicitó Boca.
En ese espacio privilegiado habrá 14 butacas reclinables, además de comodidades tales como un cuarto de baño, nevera bien surtida, aire acondicionado, sistema de vídeo y audio, pantalla LCD de 32 pulgadas, cristal de seguridad y hasta una azafata.
En la subasta, cada palco saldrá con un precio base de 30.000 a 35.000 pesos, o sea de 4.286 a 5.000 euros. En Argentina el salario medio asciende al equivalente a 700 euros y muchos precios del IPC son iguales o incluso superiores a los de España.
Así, queda claro que las 'suites' están reservadas para los ricos locales y turistas extranjeros. Éstos pagan ahora 500 euros por un asiento en las plateas preferentes. Y los más valientes pagan 200 euros para mezclarse en las gradas con 'La Doce', la barrabrava boquense, acompañados, claro, de guardaespaldas.
La popularidad del Boca ha convertido a este club, fundado por emigrantes italianos en el siglo XIX, en una máquina de fabricar beneficios. Hasta han montado un hotel Boca, de cinco estrellas y diseño vanguardista en una torre exclusiva de la ciudad.
El dinero no da la felicidad
Pese a tanta bonanza, el dinero no da la felicidad en asuntos del fútbol. Boca marcha undécimo en la clasificación de la liga profesional de fútbol, mientras por dentro se revuelve día y noche a raíz de la salida de su capitán y líder, Juan Román Riquelme.
El lío interno es tal que la afición pide a gritos el retorno del futbolista, que jugó en el Villareal de España. En el último partido, guardias de seguridad obligaron a la gente a descolgar tres banderas pro Riquelme colocadas en el interior del estadio.
El ex capitán de la casaca azul y oro decidió semanas atrás dar un paso al costado aduciendo sentir un "vacío" profesional. En verdad, algunas versiones señalan que lo hizo por marcadas diferencias con el presidente Daniel Angelici y con el director técnico Julio Falcioni.
Fuente: El Mundo
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