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Boca entrenó temprano y la tarde hará fútbol

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Ribair y su ballet

Juan Román Riquelme, con una lesión muscular desde el 25 de agosto pasado, quiere sumar minutos el domingo ante Quilmes por la novena fecha del Torneo Inicial y ganar ritmo futbolístico para llegar en forma al Superclásico de la décima jornada en la cancha de River, y por eso se cuida de no sufrir una recaída. El gran crack `Xeneize`, quien si juega el domingo alcanzará los 194 partidos en "La Bombonera" e igualará a una gloria boquense como Silvio Marzolini, entrenó en el Complejo Pedro Pompilio durante la sesión de ejercicios físicos y se lo notó muy recuperado del problema muscular que sufrió ante Estudiantes en la cuarta fecha. En tanto, el defensor Daniel `Cata` Díaz, desgarrado en el partido ante Racing de la séptima fecha, sorprendió con ligeros trotes y ejercicios con pelota, con la intención de reaparecer también en el superclásico, algo difícil pero no imposible.

Por su parte, el resto del plantel trabajó dividido en dos grupos por el DT Carlos Bianchi, quien insistió con tareas de definición, y de centros con despeje y posterior remate al arco. En un grupo se alistaron Fernando Gago, Emmanuel Gigliotti, Pablo  Ledesma, Claudio `Chiqui` Pérez, Leandro Paredes, Nahuel Zárate, Franco Cángele, Claudio Riaño, Matías Caruzzo y Joel Acosta. En el otro estuvieron Jesús Méndez, Alan Aguirre, Ribair Rodríguez, Federico Bravo, Gonzalo Escalante, Guillermo Burdisso, Nicolás Blandi, Franco Di Franco, Juan Manuel Martínez y Juan Sánchez Miño. El plantel `Xeneize` cumplió con la rutina en una jornada programada en doble turno, con miras al compromiso del domingo ante Quilmes, a las 18.15 y que será arbitrado por Saúl Laverni. Télam


Cuando menos lo maginaba, Alan Aguirre pasó a ser la primera variante de Bianchi como lateral derecho natural. El 4 de la Reserva, que aún no debutó en el ciclo del Virrey, gana la pulseada para jugar contra Quilmes. Por la tarde, el DT comenzará a probar. Es el que sigue en la lista. Sin Leandro Marín, el 4 titular con una luxación en el hombro, ni Cristian Erbes, desgarrado, a Alan Aguirre se le abre de golpe una puerta enorme. El lateral derecho de la Reserva de Saturno y Herrera es la primera variante natural en el puesto que tiene Carlos Bianchi para el próximo partido con Quilmes.

Aunque aún no tomó una decisión y se tomará su tiempo para hacerlo, el Virrey tiene a Alan adelante en consideración, aunque sabe que es una jugada arriesgada porque el pibe tiene un sólo partido oficial en Primera (con Falcioni, 1-3 frente a All Boys en junio de 2012) y aún no debutó oficialmente en su ciclo (lo utilizó en dos amistosos, contra River y San Luis). Claro que siempre hay una primera vez, y por qué no el domingo. De todas maneras, Aguirre ya tiene una buena mini carrera en Inferiores. Fue tricampeón con la categoría '93, es indiscutido en Reserva y hasta en la Selección Sub 20. Y quienes lo conocen bien aseguran que lo caracteriza su fuerte carácter y personalidad, un puntito que sumaría para el gusto del Virrey. Más de marca y no tan acostumbrado a subir por la banda y mandarse al ataque, lo cierto es que, a cuatro días de recibir a Quilmes y ante la urgencia de un reemplazante, el pibe es el único que encaja justo. Aunque el DT también piensa en correr a Caruzzo o a Ribair, o en Gonzalo Escalante, Joel Acosta y por qué no Jesús Méndez. En el turno vespertino de este miércoles comenzará a definir la cuestión. Ole


Ojo por ojo: Boca avisó que no le dará entradas a River en el próximo torneo. Con la negativa de la AFA para que los visitantes vuelvan antes del superclásico, el club de la Ribera anticipó que en el torneo Final no habrá simpatizantes millonarios en la Bombonera. La ley del Tailón llegó al fútbol argentino. Tras la negativa de la AFA y del Gobierno para que vuelvan los visitantes en lo que queda del Inicial, lo que confirmó que el público Xeneize no podrá asistir al superclásico, Boca avisó por medio de un escrito que no le dará entradas a los hinchas de River en el próximo torneo.

De no producirse un cambio rotundo, el próximo seis de octubre los millonarios recibirán a los Xeneizes en un Monumental repleto de hinchas locales. Esta medida abría enojado a los dirigentes de Boca, que ya tomaron la decisión de jugar el superclásico del próximo semestre, en la Bombonera, de la misma manera. ¿Se puede? Acá reside el problema. Si finalmente se levanta la prohibición de los visitantes, Boca estará obligado a darle a River un mínimo de cuatro mil entradas o deberá pagar una multa a la AFA. Canchallena