Del huevo huevo, a los huevitos...
Por Marcelo Rodríguez para el blog Corazón y pases cortos |
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Sí, aunque parezca mentira, para Boca, haberse quedado con diez jugadores a los 11 minutos del primer tiempo le permitió darle al encuentro ese tinte de hazaña que tanto le gusta disfrutar al hincha de Boca.
Un equipo que, tras esa roja y después de una pequeña trifulca entre los jugadores, salió a jugar con el corazón.
Fueron alrededor de diez minutos donde, y a pesar del cero a cero, el hincha xeneize disfrutó a pleno. Porque, se sabe, el futbolista de Boca debe jugar bien, obviamente, pero mucho más tiene que dar. No puede dejar gota de sudor por caer, tiene que salir arrastrándose del campo de juego.
Y ayer, por momentos eso se vivió. La épica bostera, en una cancha como allá por la década del 90; un cielo gris y River enfrente, que, a pesar de un hombre más, no podía ni pudo vulnerar el trabajo que realizó el local.
Pero como contamos las buenas, contamos las malas. Ese “huevo huevo” del comienzo como respuesta se fue desinflando. Y si bien Boca tiene un técnico que si hay algo que le sobra es viveza, picardía, Guille no supo alimentar con cambios ese fuego sagrado que se desparramaba por la Bombonera.
El entrenador falló. Tuvo un as en la manga que nunca quiso jugar. Lo tenía al Comandante Andrés Chávez para levantar a la gente, para aprovechar a un delantero que viene con el pie caliente, en racha goleadora. Pero el melli se acordó tarde. Le dio sólo cinco minutos. Tiempo en el cual, la gente volvió a tomar envión, volvió el “huevo huevo”, pero, por lógica esos minutitos no alcanzaron. Y este Boca pasó del huevo huevo a los huevitos…
Por Marcelo Rodríguez* para el blog Corazón y pases cortos (Siempre Boca)
* Marcelo Rodríguez es periodista acreditado en Boca desde hace más de 20 años. Trabaja en el diario Crónica, escribe en Don Balón y fue uno de los puntales de Informe Xeneize. También trabajó en El Cronista Comercial, La Razón y Diario Popular. Y además en la inolvidable Asi es Boca.
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