El carro delante del caballo
Por Marcelo Rodríguez para el blog Corazón y pases cortos |
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Y esto no es culpa de una sola persona. Hay una creencia, hay una manera de pensar que me parece terrible, porque esto demuestra que se está empezando a caminar el sendero que te lleva al desastre.
“Tenemos que ganar la Copa Argentina”. “Tenemos que jugar la próxima Libertadores”. Y se repite, se repite, se repite hasta el hartazgo. Pero no se dan cuenta que detrás de ese deseo sano, por calificarlo de alguna manera, es la sentencia de muerte para un club.
Porque lo único que se hace es pretender, pedir, exigir; no se habla de hacer las cosas mejor. No hay autocrítica, no hay un eje de conducción. Porque decir que Boca tiene que ganar la Copa Argentina es tan cierto como que tiene que ganar el Torneo Local también, y así nos vamos a ir desangrando año tras año. Es un latiguillo que todos gritamos, pero no nos damos cuenta el sentido que tiene todo esto.
Es poner el carro delante del caballo. Porque para llegar a un destino con seguridad, hay que tener muchas cosas en cuenta, por ejemplo, tener un buen auto. Si querés llegar a Mar del Plata bien, contento y tranquilo, necesitás un auto en condiciones. Ahora, si tu idea es llegar a Mar del Plata sea como sea, ese camino puede ser la peor de todas las experiencias.
Claro que yo también quiero jugar la próxima Libertadores. Por supuesto que es lo que quiero; pero lo quiero hacer por una cuestión lógica, por decantación. Lo quiero hacer con un equipo que esté a la altura de las circunstancias.
El Boca de Bianchi salió campeón en el 1998 y tuvo que esperar hasta el 2000 para jugar la Libertadores. ¿Alguien se murió? No, al contrario porque ese Boca tuvo tiempo para macerar un equipo. UN EQUIPO, que luego participó del torneo con seguridad y siendo candidato desde el inicio de la Copa.
Ahora, si nos desesperamos, si vamos a buscar campeonatos como pokemones, nos puede pasar como a ese pibe que le pasó un tren por arriba. Porque los éxitos no van a llegar y se van a desesperar, van a salir como locos a comprar y comprar y comprar, van a cambiar de técnicos, de canchas hasta de identidad. Todo por un maldito campeonato.
El más grande de todo una vez me dijo y creo que ya lo he dicho en notas anteriores: “Campeón, sale cualquiera, Boca, River… El tema es ratificarlo y no quedarse en ese campeonato de seis meses. Que si tenés una buena racha lo podés ganar. El tema es prolongarse en el tiempo”.
Y escucho como todos ustedes que “tenemos que ganar la Copa Argentina”, y se van a matar por hacerlo y si quedás afuera no va a ser un problema, va a ser un PROBLEMÓN y seguramente van a rodar las cabezas de los más inocentes y no de los verdaderos responsables. Porque acá hay responsables y muy evidentes.
Por eso, dejemos los deseos de lado. Dejemos los campeonatos aparte y trabajemos todos en la construcción de un equipo.Tenemos que tener once gladiadores en la cancha que se paren delante de cualquier rival y lo supere, le gane, lo pulverice. Eso es lo que tenemos que pedir, exigir; no nos volvamos locos con los campeonatos. Armemos un equipo que comience a ganar, que se consolide y que después pueda lograr lo que todos queremos que Boca logre.
Por Marcelo Rodríguez* para el blog Corazón y pases cortos (Siempre Boca)
* Marcelo Rodríguez es periodista acreditado en Boca desde hace más de 20 años. Trabaja en el diario Crónica, escribe en Don Balón y fue uno de los puntales de Informe Xeneize. También trabajó en El Cronista Comercial, La Razón y Diario Popular. Y además en la inolvidable Asi es Boca.
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