¿Boca vuelve al 4-4-2?
Guillermo incluyó a Agustín Rossi; Gino Peruzzi, Santiago Vergini, Juan Manuel Insaurralde, Jonathan Silva; Leonardo Jara, Wilmar Barrios, Fernando Gago, Pablo Pérez; Cristian Pavón, Darío Benedetto en el último entrenamiento previo a Newell´s... |
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Guillermo ensayó con Jara de titular y un cambio de esquema. En la práctica de hoy, el DT de Boca puso al ex Estudiantes entre los titulares y jugaría con un 4-4-2.
Luego de la derrota sufrida en el Superclásico, Guillermo Barros Schelotto se decidió a intentar corregir los problemas defensivos del equipo. En ese sentido, pese a que ayer había probado con el juvenil Gonzalo Maroni como enganche, hoy ubicó entre los titulares a Leonardo Jara, que tiene más retroceso, pasando a un 4-4-2 más sólido.
Así, el ex Estudiantes entraría por el lesionado Ricardo Centurión y también se confirmaron los otros tres cambios. Uno obligado (Wilmar Barrios por Rodrigo Bentancur, que viajó al Mundial Sub 20) y dos tácticos, con los ingresos de Fernando Tobio y Jonathan Silva por Santiago Vergini y Frank Fabra.
De esta forma, los once para recibir mañana a Newell´s, en la Bombonera, serían: Agustín Rossi; Gino Peruzzi, Santiago Vergini, Juan Manuel Insaurralde, Jonathan Silva; Leonardo Jara, Wilmar Barrios, Fernando Gago, Pablo Pérez; Cristian Pavón, Darío Benedetto.
Fuente: El Gráfico
Tema de debate:
El blindaje de los Barros Schelotto en Boca comenzó a mostrar sus grietas. Mantienen el apoyo total de Macri, pero algunos integrantes de la CD los miran de reojo.
Guillermo y Gustavo Barros Schelotto atraviesan con tranquilidad los 42 días que les restan de contrato con Boca. Son conscientes de que fallaron en la planificación del superclásico y están listos para "tomar decisiones" y dar un volantazo en el equipo, pero a la vez están confiados y muy lejos de pensar en irse.
Los mellizos tienen muy anchas las espaldas en la entidad Xeneize. No sólo por el altísimo nivel de idolatría del ex Nº 7, sino también porque la dupla cuenta con apoyo total de Mauricio Macri. La buena relación data de cuando el actual presidente de la Nación era la máxima autoridad en el club. Fue él quien, ante el despido de Rodolfo Arruabarrena, le dijo a Daniel Angelici que los contratara, mientras su delfín se reunía en secreto con Jorge Sampaoli, su candidato y el de Carlos Tevez, en Chile.
Pero con el correr de los meses, el apoyo dejó de ser unánime en la comisión directiva, siempre alineada detrás de lo que determina Angelici, el único que posee real poder de decisión en Brandsen 805. Una serie de decisiones futbolísticas desacertadas, que incluso puertas adentro catalogan como "caprichos", y la suma de frustraciones deportivas cubren con un manto de duda la continuidad de este cuerpo técnico para después de junio.
Hay algo incontrastable: a falta de seis fechas, y luego de 24 desarrolladas, Boca es el único líder del campeonato, con 49 unidades. Lleva una ventaja de tres sobre San Lorenzo, su único escolta, y es el equipo más goleador del torneo (49 tantos). Pero así como eso no se discute, en los pasillos de la Bombonera ven que el conjunto ingresó a una zona de arenas movedizas justo en la recta final, y subrayan: "No se puede perder este campeonato". Con esa presión deberán convivir los mellizos y el plantel hasta la última jornada.
Es cierto: ante situaciones límite, el Boca de los Barros Schelotto siempre infló el pecho y sacó un plus, que le permitió salir adelante. Cada vez que se vio obligado a ganar para mantenerse en la cima en soledad, sumó de a tres.
Sin embargo, para reducir la posibilidad de afrontar un escenario caldeado en la Bombonera, Boca consiguió modificar el día del partido con Newell's, bajo la excusa de un "pedido de los organismos de seguridad". "El sábado suele ir a la cancha menos gente que el domingo, y además, si llega a darse un resultado adverso, el diario y los análisis de radio y televisión del domingo pesan menos que los del lunes", confiaron a la nación desde la dirigencia.
Más allá de lo que refleja la tabla, la comisión directiva realiza una evaluación general de la gestión de los Barros Schelotto. Y entonces aparecen las críticas. Parte de la conducción considera que los DT "rifaron" el torneo del primer semestre de 2016, en el que Boca integró la zona 2 (sin River, San Lorenzo, Independiente ni Rosario Central). Si bien Arruabarrena había cosechado 7 de los primeros 15 puntos, los mellizos encadenaron derrotas como visitantes frente a Lanús (luego campeón), Tigre, Argentinos (descendió) y Estudiantes, que dinamitaron ya no sólo la chance de pelear por el título, sino toda chance de clasificarse para las copas Libertadores y Sudamericana. Sin triunfos en las últimas cinco jornadas, Boca sumó 20 unidades (18 menos que Lanús) y terminó 10º entre 15.
Tampoco hubo éxito por la Copa Libertadores. Se subestimó la serie semifinal contra Independiente del Valle y los ecuatorianos dieron el gran golpe en la Bombonera. Y la última oportunidad de acceder al torneo continental de este año, que era alzar la Copa Argentina, también se frustró, con la caída en uno de los cuartos de final contra Rosario Central.
Angelici, que anteayer regresó de su gira por Europa y Medio Oriente, apenas habló con el cuerpo técnico del 1-3 ante River. En cambio, se divirtió contándole anécdotas de su encuentro con Maradona en Dubái y mostrándole videos de su visita a la fábrica de Adidas en Alemania, relacionada con el contrato entre esa empresa y la AFA. Mientras, varios integrantes de la comisión directiva comienzan a observar con más detalle a un posible reemplazante. Si llegase a quedar vacante el cargo de director técnico, Jorge Almirón, justamente el sucesor de los mellizos en Lanús, será el candidato número 1.
Por Pablo Lisotto para La Nación
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